Arreaza: “están creando una educación al servicio de los mercados, un producto más de venta”

Plataforma en Defensa de la Educación Pública de Argamasilla de Alba organizó una charla-debate para informar sobre la LOMCE.

Ayer miércoles, día 12 de diciembre, la ciudadanía estaba convocada en el Centro Social por la Plataforma en Defensa de la Educación Pública de Argamasilla de Alba a una charla informativa titulada ‘La LOMCE a debate’.
El público que respondió al llamamiento tuvo la oportunidad de escuchar y comparar las opiniones de distintos afectados por la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE). Así intervinieron: María Santana, en representación de la plataforma; Fernando Arreaza, ex director de la oficina de evaluación de la  JCCM; Mª Carmen Salido, miembro del AMPA del IES “Julián Zarco”, de Mota del Cuervo; Lorena Gallego, estudiante de Historia; y Manuel Pérez, estudiante de Ingeniería Industrial.
A pesar de los diferentes puntos de partida de los ponentes, fueron muchas las afirmaciones en las que coincidieron, como la de clasificar a esta Ley de excluyente, regresiva, clasista y autoritaria, ésta última por no haber contado con la comunidad educativa para su elaboración y por degradar las competencias del Consejo Escolar, que pasará a ser un órgano meramente consultivo, recayendo toda la autoridad en el director del centro “puesto a dedo por los políticos”, que podrá seleccionar tanto el profesorado como el alumnado, éste último para la búsqueda de altos niveles en las valoraciones a las que se someterán a los centros y de cuyos resultados dependerá el presupuesto del centro. Además una parte de la financiación deberá buscarla el centro en el sector privado: “este tema está patrocinado por…”, parodiaba Lorena Gallego.
Según los ponentes, la entrada de capital privado en los centros educativos lleva a una mercantilización de la educación y a la desaparición de asignaturas que no son de interés para éste, por lo que se buscarán materias que puedan interesar al “patrocinador”.
Con esta Ley, aseveraban, se pretende aumentar la competitividad entre los alumnos y entre los centros, así aquel que tenga mayores recursos podrá llevarse los mejores alumnos y estos saldrán al mercado mejor preparados, por lo que se “elimina” desde edades tempranas la igualdad de oportunidades. Así, también se reducirá el número de alumnos que accedan a la universidad, “que volverá a estar reservada a los más pudientes”.
Otros de los temas que más controversia provocaron, es la apuesta por las reválidas desde primaria, de las que dependerá la obtención final del título, aunque el alumno tenga todo aprobado, y la segregación de los estudiantes desde los 13 años hacia la Formación Profesional o el Bachillerato.
Para María Santana, el desmantelamiento de la educación pública queda reflejado en el aumento del “apoyo económico” que se les da a los centros concertados, incluso con la cesión de terrenos para empresas del sector. Por otro lado, destacó el importante peso que adquiere la iglesia católica, introduciendo religión como optativa de “carácter curricular” y la desaparición tanto de Ética como de Educación para la Ciudadanía.
Fernando Arreaza señalaba que se están creando una educación “al servicio de los mercados, un producto más de venta”, donde se va a controlar lo que se enseña y lo que se valora, sustituyendo el sistema de evaluación del docente por uno externo con unos estándares fijados por el ministerio.
Para Arreaza, desde la administración central se quiere reducir el gasto público en educación para reducir el déficit y para reinvertirlo en promover la iniciativa privada “porque ese es el modelo que ellos quieren, donde lo privado sustituya a lo público, porque siguen pensando que un puesto escolar es más barato en un centro privado que en uno público”.

Video-resumen de la charla:

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